Este artículo fue publicado el 17 de diciembre de 2020 / Fotografia: Endesa Basket Lover
El 13 de enero de 1985, el FC Barcelona recibió una de las peores derrotas de su historia pero que además además provocó un giro en la sección de baloncesto azulgrana.
Y es que el Licor 43 Santa Coloma y el FC Barcelona se enfrentaban en el Poliesportiu Nou en partido de la séptima jornada del grupo A1 de la Liga ACB, al final de la primera vuelta donde los colomenses llegarían con 4 victorias y 2 derrotas y los "culés" con 5 victorias y una única derrota, ante el Real Madrid.
Un partido que según la clasificación se preveía igualado pero que no sería así, ya que el Licor 43 Santa Coloma, dirigido por el desaparecido Manel Comas, pasaría por encima del equipo que dirigía Antoni Serra, con Epi, Solozábal y Sibilio en sus filas , por un contundente 111-75.
El FC Barcelona no llegaba en las mejores condiciones tal y como decía la crónica de Pedro Barthe, en El País: "El Barcelona se arrastró anoche por el parquet de Santa Coloma para delirio de los seguidores locales. Los rumores son malos consejeros y ayudan a desestabilizar. Cuando anoche se entraba en el pabellón de Santa Coloma, todo eran rumores. Se hablaba del posible fichaje del pívot del Forum, Steve Trumbo, por cinco temporadas; la destitución de Serra, que iría al CAI Zaragoza, y de sus posibles sustitutos, Aito García Reneses o Jesús Codina. En estas circunstancias, con estos rumores conocidos por la plantilla, salió el Barça en la pista. La realidad era sólo una: Manel Comas no tenía a uno de sus titulares, Miquel Pou, en la cama con fiebre, y es que tenía que jugar con un semidesconocido llamado Carlos Pérez".
Este jugador fue clave y él mismo lo recuerda con fuerza ilusión: "Jugué muchísimos minutos ese día", y anuló el juego interior de los barceloneses, Otis Howard, mientras que los dos jugadores extranjeros colomenses, Mike Phillips y Craig Dikema estuvieron acertadísimos, con una gran dirección de equipo de Quim Costa.
Una derrota en Santa Coloma que daba para ver que aquello tendría consecuencias: "Tenemos a los pies en el suelo. Estamos jugando mal, pero no habra reuniones antes de Italia. Aunque parte de la prensa lo quiere, no habrá dimisiones", decía Josep María Miralles, responsable de secciones del FC Barcelona, pero después de una reunión de más de una hora, el técnico Antoni Serra era cesado.
Esta destitución sería en gran parte por la humillante derrota en el Poliesportiu Nou. Santa Coloma decidió este cambio.