Recuerdos históricos: 36º. aniversario de la primera piedra en la ACB

Este artículo fue publicado el 11 de junio de 2020 / Fotografía: El Mundo Deportivo 

Hoy, 11 de junio de 2020, se cumplen 36 años del acuerdo entre Círculo Católico de Badalona y BC Santa Coloma por el punto de partida de la era ACB en nuestra ciudad, que duró tres temporadas (1983-1984 a 1985 -1986). 

La fotografía que acompaña a este artículo en una noticia publicada en El Mundo Deportivo, el 20 de junio de 1984, donde se hacía eco de una fusión, que realmente fue una cesión de derechos federativos, en primera instancia. 

La historia comienza un poco antes. La empresa Cotonificio fue el patrocinador del Círcol Católic de Badalona tanto en la Segunda Nacional como la Primera Nacional (antigua Liga ACB) hasta el año 1983. Y un hecho empezaría a hacer temblar económicamente, que tal como relata El País en sus páginas, en artículo de Pedro Barthe, del 30 de julio de 1983: 

"El Círcol Católic de Badalona (antes Cotonificio) ha visto acentuados sus problemas económicos con la designación por sorteo de Real Madrid para participar en la Recopa de baloncesto. El equipo badalonés, en precaria situación económica, iba camino de tener un patrocinio doble, uno para la Liga y otro para la competición europea, que, junto a los derechos de televisión para la retransmisión de los partidos, le hubiera aportado una ayuda monetaria de 10 millones de pesetas. Nadie duda de que el Círcol passarà más dificultades de las previstas para mantenerse al baloncesto. En trance de desaparecer y fusionarse con el Joventut de Badalona, el Círcol parece estar perseguido por la mala suerte en estos inicios de temporada. Ya sin Aíto, el entrenador que llevó a la cima , y sin Jiménez (Andrés), el pívot revelación del baloncesto español, el Círcol tuvo que afrontar a cabo de la pasada temporada serios problemas económicos sin un pabellón adecuado para afrontar el nuevo sistema de liga que se impo oner esta temporada y sin dinero suficiente para re forzar sus filas y cubrir los múltiples desplazamientos que implica jugar la competición al estilo italiano, el rumor de que el equipo se iba a fusionar con su hermano de ciudad, llegó a tener visos de realidad. Sin embargo, la dura oposición de una directiva decidida a mantener el buen nombre de la institución -que ha llegado a perder hasta su antiguo patrocinador- forzó la supervivencia del club. 

El singular sorteo efectuado el jueves en los locales de la Federación Española de baloncesto con la elección del Real Madrid para disputar la Recopa, causa un grave perjuicio al club catalán de cara a recibir el patrocinio europeo que le hubiera dado la casa comercial. El método, la forma y el fondo de cómo se ha llevado el caso del representante español en la Recopa han sido bastante criticados por el presidente del Círcol, Pere Antoja, que ayer, manifestó a la agencia Efe: "Pido públicamente la dimisión de Segura de Luna (presidente de la federación) y de todos los que lo rodean, así como la de Antonio Novoa como presidente de la ACB, porque es ahora cuando debería tomar una postura y se ha escondido". 

La dura reacción de Pere Antoja ha sido la única que se ha producido en el ámbito del baloncesto catalán. El resto de clubes prefiere mantenerse al margen del conflicto, aunque censuran la decisión adoptada. Concretamente, el delegado de Barcelona, Josep Maria Miralles, manifestó ayer en EL PAIS: "El equipo mejor clasificado era Círcol y había salvado su situación en el terreno de juego. Cuando el Madrid renunció a jugar las semifinales, perdió todos sus derechos. Posiblemente no se han agotado todas las posibilidades del reglamento, pero en definitiva sólo hay una palabra para calificar la decisión y es muy grande para publicarse". 

A los problemas económicos se sumarían los de instalación, ya que el Círcol Católic dejó de jugar en la pista del CB Sant Josep, que además de no ponerse de acuerdo con los locales sobre el importe para jugar, la capacidad del pabellón no tenía los mínimos que pedía la nueva competición para llegar, la Liga ACB. 

Viendo esta situación, el Ayuntamiento de Santa Coloma ofreció el Pavelló Nou, el mismo donde ahora mismo no hay baloncesto de competición, y fusionar las estructuras deportivas de ambas entidades, BC Santa Coloma y Círcol Católic, que jugaba en ese momento en Liga Nacional. La aparición de Licor 43 como máximo patrocinador lo hizo todo más fácil, tanto que cuando esta empresa retiró su apoyo, comenzó a apagarse el baloncesto de élite en la ciudad. 

Un año después, se firmó la fusión y el Círcol Católic volvería a tener equipos ese mismo tiempo. El resto es el inicio del artículo.