Artículo publicado el 30 de marzo de 2021
Susana López siempre ha sido la sonrisa y el talento del baloncesto colomense, cuya primera prioridad fue ser feliz en el baloncesto y estar en la mejor compañía en el momento de hacerlo. En este artículo, en su primera parte, recordaremos su trayectoria deportiva, acompañados por la propia Susana.
Nuestra protagonista digamos que llegó al baloncesto por casualidad: “Empecé a jugar a baloncesto, no porque me gustara, sino porque mis padres se dieron cuenta de que el ballet y las sevillanas no era para mí. Era una niña muy nerviosa y necesitaba realizar alguna actividad para gastar energía, no podía parar quieta en casa. Al terminar un espectáculo de sevillanas que organizaron en mi colegio, y la posterior decisión de mi madre de borrarme después de ver "mi arte", aparecí una tarde en La Bastida con una pelota de fútbol debajo del brazo y la intención de hacer mi primer entrenamiento de baloncesto. Y ese mismo día ya me enamoré de este deporte de por vida”.
De la escuela de baloncesto del CB Santa Coloma pasó a los equipos de formación del B. Draft Gramenet, donde estuvo hasta la temporada 1996-1997, entrenada por su hermano, Sergio, lo que sería coincidente bastante temporadas después: “Una de las mejores cosas que me ha podido pasar es tener la suerte de que me entrenase a mi hermano, él siempre me transmitía la pasión por este deporte y me enseñó muchísimas cosas (también hay que decir que algunas frikadas, es lo que tiene ser fan de Bodiroga !!)”
Al llegar a la categoría junior, gran parte del equipo de Susana, tuvieron que marcharse del B. Draft Gramenet, y llegarían a una alternativa femenina al baloncesto colomense, el CB Femení Santa Coloma, un proyecto de los hermanos Tricas, con el Colegio Longaron como pista de juego: “Como el grupito de amigas que jugábamos en el Draft queríamos seguir jugando juntas, buscamos una alternativa para poder hacerlo. Y aparecimos en el Femenino Santa Coloma. ¡Cuántos entrenamientos en el Longarón, todas las tardes de frío que pasamos allí!. Pero fueron dos años muy buenos, lo pasamos muy bien y hicimos mucha piña entre nosotros y nuestras familias que nos acompañaban a todos los partidos. Recuerdo los torneos de final de temporada, era un día especial en el que disfrutamos muchísimo jugando y organizando actividades”.
Pero dos temporadas más tarde, el club se encontró con un momento de crisis interna que llevó a la desaparición del Femeni Santa Coloma, y que hacía que el equipo de Susana, tuviera que volver a buscar alternativas para jugar al baloncesto, este lugar fue un proyecto creciente, nuevo, de un colomense, Raul Ruiz, que en el Poliesportiu de Montigalà haría crecer al CB Puigfred.
La plantilla del ascenso de APADA Sagrat Cor, con Susana López y su número 9 / Fotografía: www.territoribc.com
El debut a baches 20, se saldó con el Campeonato de Cataluña y dos temporadas más, ya en senior, donde se subiría de Tercera a Segunda Catalana: “La época de sub-20 fue muy bonita, pues jugamos a mucho buen nivel y logramos quedar campeonas de Cataluña de la categoría”, comenta Susana, que al llegar a senior, su planteamiento inicial como jugadora empezaría a cambiar: “No fue hasta llegar a senior que fiché por un club para probar algo más, para exigirme un poco más a mí misma, dar un paso adelante, para poner un poco a prueba todo lo aprendido durante tantos años”. Y el debut en la Primera Catalana estaría en las filas de CBS Canyelles, donde estaría dos temporadas (2002-2004), en una época de muchas más sombras que luces en el club barcelonés.
Pero llegaría el momento de volver a casa, a volver a jugar para su ciudad, y estaría en el extinguido APADA Sagrat Cor, de donde había sido entrenadora, y donde estaría dos temporadas (2004-2006): “Y finalmente se pudo formar un senior el APADA. Jugábamos en las instalaciones de La Bastida y pudimos reunirnos algunas jugadoras que habíamos compartido pista años atrás, y otros nuevos fichajes. Formamos un gran equipo, logramos subir a Segunda Catalana con muy buenos resultados. La segunda temporada no salió del todo bien, y perdimos las fases de descenso. Sin embargo, me quedo con buenísimos momentos con tantas personas con las que hoy en día mantengo la amistad”.