Fin del viaje. Siempre ha sido emocionante

Artículo publicado el 13 de enero de 2022

Después de más de casi 15 años dándole voz al baloncesto colomense desde esta página, quiero aprovechar para escribir sobre mí, permitidme que haga una reflexión y una comunicación. Me permito esta licencia, espero que me perdonéis, pero www.territoribc.com siempre ha estado al servicio de los entrenadores, especialmente colomenses, y como entrenador colomense, quiero escribir esta reflexión.

Llevo muchísimos años entrenando, desde los 16 años que empecé a hacerlo, y he vivido muchas situaciones, la gran mayoría increíblemente positivas y algunas no tan increíblemente positivas, pero por suerte, pocas, y de las que siempre aprendí. Todos estos años entrenando, todos estos muchos años entrenando diría yo, me han ayudado a crecer como persona y me han permitido ayudar a crecer a un número importante de jugadoras y jugadores, así como entrenadoras y entrenadores que han trabajado conmigo, y ésta ha sido mi gran satisfacción y mi orgullo personal. Disfrutar del baloncesto ha sido toda una filosofía de vida para mí, y como todo en esta vida, seguro que me he equivocado y seguro que he acertado, pero siempre he sido transparente y honesto, con los grupos a los que he entrenado, tanto de manera individual como de forma colectiva.

Durante estos años la ilusión ha sido el mejor de los motores para cada temporada volver a empezar con fuerza y sin perder de vista los objetivos principales y prioritarios como entrenador: formar a jugadoras y jugadores como deportistas, desde un abanico de valores y principios éticos que en nuestra sociedad se van perdiendo desde hace un tiempo hacia aquí, y me gustaría, no que estuviérais de acuerdo conmigo, pero sí que hiciérais una reflexión al respecto.

Pues esta ilusión se ha ido y definiendo esa honestidad que siempre he intentado aplicar, me aconseja cerrar mi etapa en los banquillos, después de más 30 años en activo, al final de esta actual temporada. Es el momento.

En esta larga etapa he podido disfrutar de compañías increíbles, de gente implicada en el baloncesto, de gente apasionada que ha creído en este deporte.

Fotografia: Ainoa Madueño

Quizás no era necesario hacer este artículo pero como no soy muy amante de las redes sociales y ya que he invertido casi la mitad de la vida deportiva como entrenador en www.territoribc.com, quería expresar mis intenciones en este final de etapa en los banquillos. Una página que, como he comentado anteriormente, siempre tiene las puertas abiertas a los entrenadores de la ciudad.. 

Quisiera dar las gracias a todos y todas los jugadores y jugadoras que he tenido el placer de entrenar; a los entrenadores que han querido aprender a mi lado ya quienes espero que les haya podido influir un poquito; a los entrenadores rivales y no rivales, con los que el baloncesto nos ha transformado en amigos; en los clubs donde he estado, para darme la oportunidad de trabajar para ellos; a las madres y a los padres de los grupos a los que he entrenado y a todas aquellas personas desinteresadas con las que he tenido el privilegio de cruzarme en esta magnífica travesía por el baloncesto y de manera especial, a mi familia, por ser tan pacientes con mí.

Quisiera también hacer tres menciones extraordinarias. 

La primera por un amigo entrenador, Jorge Sánchez: Jorge, ya no estás con nosotros pero el baloncesto me permitió poder ser tu amigo. Te echo de menos, amigo.

La segunda, por un club, el Bàsquet Neus. He tenido el placer de formar de la familia azul las últimas cinco temporadas, y puede que no consiga explicarlo del todo pero para un entrenador colomense poder trabajar en el club de referencia en la formación histórica de la ciudad es un pequeño sueño, al menos por mí. Dejar los banquillos, en esta casa es un final de etapa, no deja de dar tristeza, ya que dejo mi hogar, pero sé que en un sitio mejor no podía estar. Sólo puedo estar agradecido a la familia azul.

La tercera, y no en este orden, es para mi último grupo de trabajo, el junior femenino del Bàsquet Neus. Un auténtico orgullo y un auténtico placer haber compartido pista y vestuario con este extraordinario grupo humano: Berta, Núria, Sierri, Marta, Nayara, Carme, Luana, Elsa, Paula, Leire y Ari, y los compañeros en el equipo técnico, Txell y Víctor. El listón está muy alto pero sin dudas, ha sido el mejor grupo que he entrenado nunca, y que me perdonen otros grandes equipos que han pasado por mis manos, pero hoy, mi corazón es el que me dirige. Disculpad por dejaros volar solas, todavía nos queda media temporada para acabar de disfrutar de vosotras.

No quiero despedirme, sin unas palabras de entrenador veterano, y que están dirigidas a los entrenadores que comienzan: No os equivoquéis, el resultado no os llevará a ser mejores entrenadores, enseñar valores sí que os llevará a ser mucho mejores entrenadores y personas. Recordad que el respeto se gana, y éste debe ser uno de vuestros objetivos principales, que os respeten por vuestros valores, no por vuestros resultados. Los primeros duran para siempre y los segundos duran hasta que dejéis de ganar. 

Gracias a tod@s por este emocionante viaje

David Parra

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